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14.07.2022

Palets a medida para productores de queso roquefort

CS1

El modelo estándar del palet de plástico CS1 de Craemer es la base de la versión modificada y diseñada especialmente para el transporte de queso Roquefort. Foto: Grupo Craemer

De la cuajada de queso de oveja hasta la curación: El transporte de roquefort requiere una logística muy desarrollada con portadores de carga totalmente adaptados a sus necesidades especiales. Foto: iStock/barmalini

La producción de roquefort, el tradicional queso azul del sur de Francia con denominación de origen protegida, es un proceso delicado. Un productor de la especialidad de leche de oveja necesitaba un palet de plástico robusto y seguro para los alimentos, especialmente diseñado para el exigente transporte del queso azul durante sus distintas etapas de producción. El productor francés recurrió a la empresa de ventas Craemer France Sarl, del grupo internacional Craemer. En su sede alemana, Craemer, pionera en el moldeo por inyección y con décadas de experiencia en el procesamiento de plásticos, modificó su modelo de palet CS1 específicamente para los requisitos especiales del cliente. Desde entonces, la entrega de 15.000 portadores de carga de polietileno puro (PE) garantiza el transporte seguro de una producción anual media de 10.000 toneladas de roquefort.

La producción de esta conocida especialidad de queso se basa en más de 150 años de sabiduría y entraña procesos especiales precisamente definidos por la denominación de origen protegida. El roquefort auténtico ostenta el sello con denominación de origen desde 1925, fue el primer queso protegido de Francia. La base se elabora con leche pura de oveja sin tratar en queserías de los alrededores del pueblo Roquefort-sur-Soulzon, en el departamento Aveyron en el sur de Francia. Posteriormente, las piezas de queso se llevan a cavas de curación natural de la región, para que desarrollen todo su sabor. Después de un proceso de maduración de al menos tres meses, la cuajada de queso de oveja se convierte en roquefort.

Las distancias entre los distintos procesos de elaboración son cortas pero, sin embargo, requieren de una manipulación muy controlada y una logística sofisticada con portadores de carga completamente adaptados a las exigencias y particularidades que requiere esta producción. Un importante fabricante de roquefort necesitaba sustituir sus existencias de palets. Después de evaluar las distintas ofertas del mercado, el productor de queso se decidió por el modelo de palet CS1 de Craemer.

Desarrollado para requisitos especiales

El equipo de desarrollo de Craemer realizó algunas modificaciones en el modelo CS1 para cumplir con las especificaciones del cliente francés, diseñando el duradero europalet para adaptarse perfectamente al transporte del roquefort. "Uno de los puntos fuertes del grupo Craemer es la completa adaptación a las necesidades y particularidades de nuestros clientes.", dice Cyril Wahl, director de ventas de Craemer France Sarl. "Si ninguno de los palets o palet boxes de nuestro catálogo estándar cumple con las expectativas del cliente, le podemos ofrecer una solución a medida". Explica el trasfondo: "En nuestra sede central alemana todo está bajo un mismo techo, la investigación y desarrollo, la fabricación de los moldes de inyección y la producción. Así podemos controlar todo el proceso de producción. Garantizamos un seguimiento completo del producto desde el primer boceto hasta la entrega de los palets."

El palet CS1 modificado por Craemer para el cliente está concebido específicamente para albergar un número exacto de 49 contenedores especiales. Para anclar los contenedores al palet de manera segura, Craemer ha modificado para este cliente el estable borde exterior de siete milímetros de este modelo de manera que bloquee perfectamente la carga y proporcione una estabilidad adicional.

Mayor capacidad de carga gracias a los perfiles de refuerzo

Para aumentar aún más la capacidad de carga de nuestros, ya de por sí robustos, palets de plástico, Craemer se decidió por equiparlos con dos perfiles de refuerzo. Teniendo en cuenta las condiciones especialmente húmedas de las cavas de curación natural, el productor de plásticos eligió, expresamente para esta aplicación, perfiles de refuerzo de acero inoxidable para evitar daños por corrosión.

"El grupo Craemer fue el único proveedor que tuvo en cuenta nuestras condiciones con toda la normativa para nuestro producto con denominación de origen protegida y que nos ofreció un modelo de palet a medida que se adecuaba perfectamente a nuestras necesidades", aclara el director del departamento de curación y envasado de la empresa. Y añade: "Para nosotros es muy importante garantizar el transporte del roquefort en las mejores condiciones. Gracias a estos palets no hay nada que impida una logística segura y controlada". Además de tener en cuenta los requisitos logísticos, Craemer fabricó los palets en un color especial coincidiendo con el logotipo corporativo del fabricante de roquefort.

El CS1: Palet de alto nivel

El fabricante de queso francés se decidió por el modelo CS1 por varias características de calidad y diseño. Además de la robustez y las propiedades de seguridad alimentaria, también influyeron los bordes achaflanados de todos los patines, ideales para diversas carretillas industriales. Las horquillas de la pequeña transpaleta eléctrica utilizada por el cliente también se pueden retraer fácilmente. Por lo tanto, el palet es idóneo para el almacenamiento automatizado. Además, el palet se caracteriza por una cubierta superior casi completamente cerrada y por sus patines soldados. Esto facilita su limpieza, un requisito indispensable para una higiene completa en la industria alimentaria.

El palet de plástico de una sola pieza, fabricado con polietileno (PE) de alta calidad, es extremadamente robusto, prácticamente irrompible e inastillable y tiene una vida útil de varios años incluso con un alto índice de rotación. Los palets CS1 de Craemer son totalmente reciclables, por lo que también cumplen con el compromiso con la sostenibilidad del cliente francés. "Cuando se acabe su vida útil, Craemer retira los palets y los recicla en su totalidad. Esto es muy importante para nosotros, está en consonancia con los objetivos de nuestra política de responsabilidad social corporativa", señala muy satisfecho el representante de la empresa fabricante de roquefort.

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